viernes, 14 de octubre de 2011

Crítica de Contagion

Frase de cine

“Existe otro organismo en este planeta que sigue el mismo patrón que los humanos. ¿Sabe cuál es? Un virus. Los humanos son una enfermedad, son el cáncer de este planeta, son una plaga”.

Hugo Weaving (Matrix)



Crítica

Steven Soderbergh es de esa clase de directores capaces de combinar cine comercial (Ocean’s eleven, Erin Brockovich) con películas más personales (Sexo mentiras y cintas de vídeo, Kafka) e incluso combinaciones de ambas (las dos Che y Traffic, por ejemplo). Contagion se encuadra entre estas últimas, seguramente las mejores, ya que con ellas trata de gustar al gran público sin resultar simplón. Y de regalo nos ofrece el resurgimiento del cine de catástrofes, aquel nacido en los años 60 y 70 a la sombra de la guerra fría y que consistía en reunir un gran elenco de estrellas y jod…(perdón) fastidiarles la vida con terremotos, incendios y accidentes espantosos: Terremoto, El coloso en llamas, Aeropuerto… son joyas que las cadenas de televisión programan cada vez que alguna catástrofe real nos golpea, protagonizadas por gigantes como Paul Newman o Charlton Heston. Pues bien, Soderbergh no sólo ha conseguido incluir a Matt Damon, Jude Law, Kate Winslet, Gwyneth Paltrow o Marion Cotillard (cargándose a alguno de ellos a los cinco minutos, por cierto), sino que además logra que estos grandes intérpretes no sean más importantes que el propio argumento, que es sencillo y descarnado: un virus puede acabar con todos nosotros.

La cinta comienza con la pantalla en negro y una tos seca. Todos los espectadores lo saben ya, se trata de la primera víctima. De ahí hasta el final la película avanza al ritmo que marca la propia epidemia, acelerando progresivamente según se va extendiendo por el mundo. No cae en las absurdeces de los últimos tiempos (y con absurdeces me refiero a Roland Emerich: 2012, El día de mañana), descarta patrioterismos o discursos heroicos, y tampoco se transforma en el espectáculo gore que podría ser, con vómitos, pus y demás.

No, Contagion no da asco sino miedo. Terror a que un simple viaje en avión, un saludo en una conferencia internacional o el estornudo de un turista pueda ser el principio del fin del mundo tal y como lo conocemos. Y para rizar el rizo no se inventa organismos o cargos falsos ni salas de control llenas de expertos superocurrentes, sino que imagina de forma bastante realista y documentada cómo la Organización Mundial de la Salud y los gobiernos de los diferentes países se enfrentarían a una pandemia.


Así que ya sabes: entrada, palomitas, guantes, mascarilla y al cine.



Recomendada para...

Apocalípticos.


No recomendada para...

Hipocondriacos y asquerosos (no los que no se lavan, sino aquellos con pánico a beber del vaso de un amigo).


Te gustará si te gustó...

Estallido y El incidente.


Una excusa para no ir solo al cine...

Damon, Law, Palthrow, Winslet, Cotillard… ¿alguna vez has visto tantas estrellas juntas?


Una curiosidad

Steven Soderbergh, el director de Contagion, es como esos toreros que dicen que se retiran y siempre vuelven a la plaza. Ha anunciado su marcha del mundo del cine en incontables ocasiones pero, afortunadamente, siempre parece que le queda una última película que hacer. Nosotros, mientras dure, a disfrutar de su talento.

No hay comentarios:

Publicar un comentario